Los síntomas de los Hallux Valgus, comúnmente llamados, juanete, son variables en cada paciente, siendo frecuente el enrojecimiento y dolor sobre la zona desplazada, que además al ensanchar el pie, produce un incremento del roce del calzado. Pero ¿qué es exactamente? Y ¿cómo tratarlo? A continuación te lo explicamos y te contamos un caso clínico real.
¿Qué es el Hallux Valgus (o juanete)?
El Hallux Valgus—o juanete— constituye una deformidad del antepié común, sin embargo, compleja, es una subluxación de la primera articulación metatarsofalángica con desviación lateral del dedo gordo y medial del primer metatarsiano. Le acompaña pronación o valgo del dedo gordo en los casos más severos. La deformidad se acompaña también del desplazamiento de los sesamoideos, así como desviación plantar del tendón del abductor, y lateral de los tendones del flexor y extensor largo del dedo gordo.
El 90 % de los pacientes son mujeres, siendo las limitaciones más frecuentes el dolor medial sobre la prominencia ósea, el dolor plantar bajo la cabeza de los metatarsianos y la aparición de dedos en martillo y garra.
Causas del Hallux Valgus (o juanete)
- Genéticas
- Calzado
- Biomecánica del pie
- Morfología ósea
- Enfermedades sistémicas
No se ha demostrado una causa única de la deformidad, en cambio, se han descrito una serie de factores intrínsecos predisponentes que vuelven al pie más vulnerable al efecto de dicho calzado. Como son la longitud y morfología de la cabeza del primer metatarsiano, de esta manera como determinada orientación espacial de la articulación metatarsocuneiforme del primer radio.
Caso clínico
HALLUX ABDUTUS VALGUS (juanete) Y DEDO EN MARTILLO
«Ana», nuestra paciente X, acude desesperada a nuestra clínica porque el traumatólogo no le aconseja operarla debido a su edad, «Ana» tiene 85 años.
Estuvimos más de 6 meses intentando cerrar una úlcera en un segundo dedo martillo del pie izquierdo. Realizó visitas cada 15-20 días. Pero la úlcera se cerraba en falso y la paciente no podía caminar. Y esto, mermaba su calidad de vida pues «Ana» es una mujer muy activa. Por ello, le propusimos una intervención con cirugía mínimamente invasiva, la cual aceptó sin pensárselo dos veces.
A los quince días ya fue intervenida. Bajo sedación, anestesia local, sin hemostasia… Salió caminando por su propio pie, no siempre es de esta manera, sin embargo, «Ana» no tuvo ningún dolor postquirúrgico.
Se le procedió Silver primer metatarsiano, osteotomia completa Reverdin-Isham, Akin falange hallux, tenotomía del aductor, osteotomia base y cabeza falange próximal y osteotripsia cabeza falange proximal del segundo dedo.
Esta es una cirugía en la que no utilizamos tornillos, ni agujas de fijación y en la que la premisa es ejecutar unos vendajes de cambio semanal. Esto nos permite efectuar un seguimiento cercano y observar la evolución de la cirugía bajo control fluoroscópico, hasta que la consolidación ósea sea la óptima.
Este tratamiento coincidió en medio de la emergencia sanitaria provocada por la COVID-19, a pesar de esto «Ana», acudía semanalmente a las curas a consulta de forma regular. A día de hoy el resultado es muy bueno y ella está muy contenta.
Quiero agradecer a «Ana» la confianza depositada en nuestra clínica, y felicitarle por ser un claro ejemplo de mujer luchadora y de gran fortaleza, es una referente a seguir.
Este es el resultado del pie de «Ana», antes y después:

